jueves, 20 de enero de 2011

GEL EXFOLIANTE

La Exfoliacion a través del tiempo el ser humano ha recurrido a formulaciones que contribuyen al buen estado de la piel; tal es el caso de los exfoliantes, productos granulosos que permiten la eliminación de células muertas, escamas e impurezas que se depositan en la superficie de la epidermis.



Al respecto, es importante saber que cada día se forman nuevas células en la capa más profunda de la piel, las cuales van subiendo hasta alcanzar la superficie, proceso que se efectúa en periodo de 28 a 30 días. Lo anterior impide que la epidermis se desgaste, pero da lugar a la acumulación de residuos que pueden ocasionar problemas a la piel, como obstrucción de poros y apariencia.



Por estas razones, el uso de exfoliantes ha ganado terreno en el ámbito cosmético, pues suavizan, iluminan y devuelven la belleza a la piel. Entre sus principales ingredientes se encuentran materiales granulosos, ácido láctico y alfahidroxiácidos (AHA).



Cada etapa es distinta
La exfoliación limpia la epidermis a profundidad, lo que, además de los beneficios antes mencionados, permite que la piel aproveche el paso de sustancias que la oxigenan y nutren; puede realizarse:
·        1 ó 2 veces a la semana cuando la piel es grasa.
·        normal o seca cada 15 días.
·        Piel  sensible lo recomendable es cada 15 ó 30 días (usando productos hipoalergénicos)



Cabe destacar que los exfoliantes tienen diferentes mecanismos de acción, por ejemplo, hay algunos que separan a las células muertas de la superficie de la piel al disolver la fina barrera de tejido que las une, en tanto otros desincrustan escamas, puntos negros e impurezas


Dichos productos pueden encontrarse en forma de gel o crema, y se aplican durante la ducha mediante suave masaje en vientre, caderas, nalgas, extremidades y rostro, prestando especial atención a las zonas más secas y ásperas (como rodillas y codos). Ahora bien, este método se efectúa de distinta manera dependiendo de la edad de la persona:

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Adolescentes. Durante esta etapa llega a ser común que la epidermis del rostro presente abundancia de sebo, por lo que resulta conveniente exfoliarla hasta dos veces por semana, pues además de que se controlará el exceso de brillo facial, esta acción prevendrá brotes de acné.
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Adultos. Hay que elegir exfoliantes que contengan alfahidroxiácidos y retinol, ya que son benéficos para combatir las primeras líneas de expresión.
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Posterior a la exfoliación, hay que aplicar alguna crema (específica para rostro y cuerpo), ya que ésta cubre y protege piel y cutis al retrasar la pérdida de agua, o bien atraen humedad y la mantienen. Estos productos deben aplicarse mediante suave masaje.
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Es importante mencionar que el uso excesivo e inadecuado de productos exfoliantes puede deteriorar la piel, por ejemplo, eliminar la barrera de grasa natural, inhibir el funcionamiento de las glándulas productoras de sebo, reducir la retención de humedad y promover la deshidratación de la epidermis. Asimismo, pueden desgarrarse las fibras de colágeno y, por ende, manifestarse líneas de expresión, arrugas y flacidez.



EXFOLIANTES  NATURALES:
A:
INGREDIENTES:
· Avena ½ kilo
· Linaza ½ kilo
· Germen de trigo ¼ kilo
· Limón
Mezclar avena, linaza y germen de trigo Muela los ingredientes en una licuadora. Luego agregar ½ taza de miel, compacte. Aplique con movimientos circulares, no en la zona de los ojos los dejan actuar 1 o 2 minutos. Si tiene piel grasa agregue limón.
Empezar con una ducha caliente, luego poner la mezcla (el exfoliante raspa la piel), enjuague con agua tibia. Algo que tienes que recordar que cuando te des un exfoliante ya sea casero o comprado, debes terminar el proceso echándote una crema protectora, ya que tu piel está más limpia y desprotegida que nunca. Una crema para finalizar protegerá a tu piel del sol y los agentes externos Finalmente aplicar crema humectante.
Guardar en el refrigerador
B:
Limpiar la cara como de costumbre y luego poner aproximadamente un litro de agua hervida y ligeramente enfriada en un recipiente. Luego se inclina sobre el recipiente el rostro unos 2 0 centímetros del agua caliente. Se coloca una toalla sobre la cabeza de modo que se tape y el rostro reciba el vapor ascendente. Permanecer así un máximo de 5 minutos.
C:
Lavar y picar 1 zanahoria y licuar por unos instantes. Mezclar el jugo resultante con una crema hidratante. Aplicar, una vez por semana, mediante masajes circulares sobre el rostro para eliminar las células muertas que impiden la oxigenación de la piel.
Exfoliante natural para los codos
A:
Para exfoliar los codos, se debe cortar el limón por la mitad y aplicarlo sobre los codos y mantener así varios minutos. A continuación debe untarse la zona con aceite.
EXFOLIACIÓN SEGÚN EL TIPO DE PIEL
A:
Exfoliante para pieles normales: crema de almendras y miel
- 1 o 2 cucharadas de almendras trituradas
- 1 cucharada de miel
- 2 cucharadas de yogur natural
Se mezclan todos los elementos bien y se extienden sobre la cara mojada con las yemas de los dedos, dando masajes de manera ascendente en movimientos suaves. Se deja actuar durante unos minutos y se aclara con agua caliente. Se seca con una toalla poco a poco sin arrastrar.
B:
Exfoliante para piel seca: de azúcar
- 2 cucharadas de azúcar granulado
- 1 cucharada de aceite de aguacate, o de almendra. En el caso de no tener, puedes utilizar aceite de oliva.
- 1 cucharada de crema de leche.
Se mezclan bien los elementos y se extienden sobre el rostro mojado dando masajes de manera ascendente. Se deja reposar unos minutos, se aclara con agua tibia y se seca con una toalla sin arrastrar, poco a poco. Esta receta tiene otras variantes, puedes usar también azúcar con yogur, o sal y yogur o, incluso, sal con leche limpiadora. El mecanismo es el mismo.
C:
Exfoliante para piel grasa: de harina de maíz y plátano.
- Medio plátano maduro
- 2 o 3 cucharadas de harina de maíz.
Se aplasta el plátano con un tenedor y se añade la harina. se extiende la mezcla por la cara mojada con las yemas de los dedos dando un masaje, se deja reposar unos minutos y se aclara con agua caliente. Si se desea se puede repetir. Para secarlo, como en las otras recetas, se hace poco a poco sin arrastrar.





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